Esta editorial presenta los fundamentos conceptuales y políticos que orientan la creación de la Revista Internacional de Ciencia Abierta. Sostiene que la apertura del conocimiento no constituye un cambio de paradigma, sino una reorientación ética hacia el bien común, en línea con el ethos científico formulado por Merton. A partir de una perspectiva crítica y situada, se abordan tensiones estructurales como la injusticia epistémica, las barreras lingüísticas, económicas y tecnológicas, y la necesidad de transformar los sistemas de evaluación científica. Se reivindica la ciencia abierta como una estrategia para democratizar el acceso, fomentar la colaboración transdisciplinaria y reducir las asimetrías en la producción de conocimiento. La revista se posiciona como un canal formal e inclusivo para articular políticas, investigaciones, experiencias y debates en torno a la ciencia abierta en el contexto de la educación superior, con especial atención a América Latina.